Brindo por los planes que no son míos. Brindo por la vida.

En la mierda. Así creo que esta todo. O al menos eso pensaba hasta hace unos días.


No quiero empezar esta entrada como una entrada más, sino como algo mío, algo que forma parte de mi día a día. No es una anécdota, ni lo calificaría como un sentimiento de felicidad ni de tristeza, ni de rabia, simplemente como una preocupación. Algo de lo que me ocupo antes de que pase.


Pasado. Presente. Futuro. ¿Qué importa?


En eso fundamentalmente se ha centrado mi semana. ¿Es todo una línea temporal como pensamos o todo interactúa de forma simultanea como se esta empezando a comentar?
Quizás mi mente aún esta demasiado cerrada como para entenderlo todo y por eso mejor no intento comprenderlo. Por ahora.

Intento ser paciente, dejar que todo fluya, pero es tan complicado aunque a simple vista parezca sencillo....
Siento que me falta el tiempo para aprender todo lo que quiero, para hacer todo lo que me gustaría, para saber, para madurar, para creer ciegamente, para que todo esté en el orden correcto. En mi orden correcto. Pero todo es más sencillo que eso y la sencillez es complicada para quien se complica la vida tanto como yo.

Poco a poco comprendo que el plan de la vida es que no sepa los planes que tiene para mí, que no me anteponga a nada, simplemente quiere que los viva, que los disfrute y que entienda que ni todo es tan bueno ni todo es tan malo, que hay tiempo para todo y todo se presenta en su tiempo, simplemente tengo que estar dispuesta a recibir lo que me toca en el momento que me toca, tanto lo bueno como lo malo y agradecerlo, porque lo bueno se disfruta y de lo malo se aprende.

Pienso que un error se debe cometer tantas veces como sea necesario hasta que se aprenda la lección, por eso me empieza a parecer inútil decir "siempre me pasa lo mismo". Evidentemente será así mientras que haga siempre lo mismo. Igual debería probar a cambiar ciertas cosas que aún siguen igual y tengo tantos cambios planeados.....pero sé que mis planes no van a servir para nada. Da igual que tenga un plan A, B, C o Z, la vida se encargará de darle un giro de 180 grados cuando mejor le parezca o cuando este preparada para recibirlo y no importará si lo quiero, si lo pido o si pienso que no es el momento, pero eso no quiere decir que no haga planes, simplemente que no me apegue a ellos y que los haga perfectos por su flexibilidad y su capacidad de dejar de ser cuando no procedan, que los deje ir.

Esta semana ha sido difícil. De enfados, de tristeza, de maldecir mi suerte, mi vida y a mí misma, pero también ha sido una semana de reflexión, de no querer parar, de seguir adelante y de escuchar todas esas voces que me decían que hay mil soluciones para un solo problema.
Quiero aprender a no agarrarme a la vida, simplemente a dejarla ir y a que sea como tenga que ser, pero sobre todo, quiero aprender a sonreirle porque los planes que tiene preparados para mi igual son mejores que los míos propios.

Comentarios

Entradas populares